-La muerte del cantante grupero Sergio Gómez recibe amplia cobertura por parte de los medios de comunicación.
-Dejan de lado supuestos vínculos con el narcotráfico, como ocurrió hace un año con otro grupero, Valentín Elizalde.
El asesinato del cantante grupero Sergio Gómez del grupo K-paz de la Sierra, en el estado de Michoacán; nuevamente desató un ‘bombardeo’ televisivo, radiofónico y en medios impresos. Y es que la noticia del vocalista de música duranguense acaparó las primeras planas de los periódicos, pero fue en la televisión donde prácticamente ocuparon el tiempo para llevar a la gente lo que acontecía.
Programas como Ventaneando y La Oreja dedicaron por más de 9 días los espacios triple A, considerados los más caros o estelares. Mientras, en espacios noticiosos el acontecimiento también implicó un tiempo considerable aunque en menor dimensión.
En medios impresos, periódicos a nivel nacional como El Universal, El Sol de México y Excélsior dedicaron, el día en que se confirmó el hecho, la nota principal de su primera plana, mientras que en otros como Reforma si tomó importancia, aunque no como nota principal.
Es de destacar que antes de conocerse la muerte, había trascendido que el cantante se encontraba secuestrado, lo que provocó que los medios de comunicación estuvieran desde ese entonces al pendiente para poder informar lo que ya se preveía.
El lunes 3 de diciembre finalmente se despejaron dudas y se encontró su cuerpo sin vida en una comunidad llamada Chiquimitío, información con la que la Procuraduría General de Justicia de Michoacán (PGJM) confirmó la noticia; el cuerpo de Sergio Gómez presentaba muestras de martirio.
Se tiene como antecedente que el fallecido había manifestado a su compañero de agrupación Humberto Durán que algo le sucedería y que no tenía miedo de morir. Debido a esta situación se le realizó una entrevista a Durán para indagar acerca del caso, éste aseguró que la última vez que vio a Gómez fue después del concierto, en el momento en el que las camionetas fueron a recogerlos al lugar a donde tocaron.
Investigando se obtuvo el dato de que Sergio Gómez sufría de amenazas telefónicas, a pesar de esta situación sus actividades no sufrieron ningún cambio.
El asunto llegó a tanto que la emisión del programa Ventaneando se le brindó a K-Paz de la Sierra.
“Nuevamente estamos conmocionados en el medio del espectáculo por la muerte de un artista, alguien a quien estimamos y quien tenía mucho por delante, nos sentimos tristes por esto y por ello le hemos preparado toda la información sobre este caso”, dijo la conductora Paty Chapoy en una de sus emisiones.
De acuerdo con las autoridades, lo que permitió asegurar que se trataba del cuerpo del cantante fue el tatuaje de pantera negra que se encontraba ubicado en el brazo izquierdo de Gómez.
Sin embargo, el hecho reside en que posterior al presunto secuestro y asesinato, la cobertura informativa de varios medios continúo y lejos de disminuir, los tiempos dedicados al sepelio, traslados y testimonios de amigos y conocidos del cantante se intensificó, lo cual restó importancia a noticias como las reformas al Instituto Federal Electoral (IFE), por ejemplo.
Lo mismo ocurrió en diciembre de 2006, cuando la muerte de otro grupero: Valentín Elizalde, acaparó las primeras planas y tiempos televisivos.
Sin embargo a pesar del tiempo que se le dedica a esta noticia y de los detalles que nos brindan a la sociedad, no tocan nada acerca de los presuntos nexos que tenía Sergio Gómez con el narcotráfico.
Como ya había sucedido con otros famosos asesinados, días después de la muerte del vocalista del grupo K- Paz de la Sierra, su disco titulado Capaz de todo por ti, se logró posicionar en los primeros lugares de ventas en los Estados Unidos.
La investigación de este caso… continúa.
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